Llueve



Llueve, sobre las cenizas,
sobre la ropa recién lavada, 
sobre los zapatos rotos 
y los pies descalzos.

Llueve sobre los charcos,
sobre las flores y las frutas maduras,
sobre los ríos y sobre el Mar,
sobre los calles pavimentadas
y sobre las calles de lastre.

Llueve sobre este corazón,
que se abrió nuevamente para amarte,
y se descubrió capaz de sanar.

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