Los treintas
Se acabaron los 20's. Se acabó el hecho de que podás comer las porquerías que te de la gana sin engordar un gramo. Se acabó la U, a menos de que vayás por un postgrado. Pero en ese caso, definitivamente se acabó el pretil, y el tiempo para no hacer nada (aunque yo siempre saco tiempo para no hacer nada, lo considero importante). Se acabó la falda de tu mamá y la billetera de tu papá -aunque más de uno todavía vivimos en sus casas. Unos más frescos que otros. Pero... ¿cuál es nuestro lugar en la sociedad? ¿que se espera de nosotros? Definitivamente, que seamos población económicamente activa. Que nos casemos y procreemos. Que tengamos casa, carro y la última tecnología. A mi no dejan de llamarme los bancos para ofrecerme tarjetas de crédito. Y para cerrar con broche de oro me llaman "señora", como la gran cosa. Logran ponerme de malas. "¿Señora?, ¿en qué momento? ¡A mi nadie me avisó!". Muy bien, cambié de talla, mis caderas están más anchas y uso cremas antiarru...