Estoy harta de mendigar amor y tiempo a ciertos especímenes llamados hombres. Yo también tengo cosas que hacer. Por ejemplo, subirme a mi bote y remar hacia la Luna.
El cariño nace solo, el amor crece después, no se mendiga, ni se forza, ni se pide. Tampoco se puede obligar.
Brindo por esos momentos en la vida, en que uno descubre el cariño nacer, a veces no pasa a más a veces sí, así que hoy lo hago por ellas que también estuvieron ahí y vieron el cariño de cerca.
Hay una frase, no recuerdo su autor, pero aplica perfectamente bien: siempre hay alguien que quiere a alguien que no le quiere; siempre hay alguien que espera a alguien que nunca llega; a veces dan ganas de matarlo para que no lastime nunca más." Pero se aprende, el tiempo sirve para eso. Gracias por tu visita. Un abrazo Y felices fiestas
Llueve, y el espanto se hace trizas. Llueve, y procuro hacerme un ovillo. Llueve en tus ojos, llueve en mis labios... Me armo con cada gota, y cada gota me hace más fuerte. Llevo adentro un aguacero, de ramas caídas, de horizontes lejanos, de cielos despejados. Me sacudo el agua: el agua me ha eternizado. Después de mojarme el alma, me escurro de recuerdos.
La Chaskañawi u "Ojos de Lucero" es, sin duda una de las mejores novelas costumbristas de Bolivia; la obra es un testimonio de la vida provinciana del sur de Bolivia, contiene tintes autobiográficos y retazos de ironía, que a veces, desciende al sarcasmo. "La Chaskañawi" de Carlos Medinaceli. Se preguntarán de qué les estoy hablando... Mi fin es explicarles, qué es esa palabra que está al costado izquierdo de mi blog, debajo de mi fotografía, en un lenguaje que probablemente desconocen... Chaskañawi, en quechua, el cuarto idioma más hablado en toda Ámérica, significa "mujer de ojos grandes y brillantes, y pestañas largas". El quechua, idioma oficial en Bolivia, Perú y Colombia, es también utilizado en la zona andina de Ecuador. Al igual que el aymara y el árabe, utiliza sólo tres vocales: a, i, u. Sin embargo, el quechua es mucho más dulce que el aymara, también propio de la zona. No sólo en su pronunciación, sino en la forma de llamar las cosas y caracter
Una estrella en medio de un cielo en decadencia, es un poema, Siempre me han fascinado los atardeceres: son principio y fin. ¿Y si amanecés? ¿Y si me acariciás como el Sol, cuando recién se asoma? ¿Y si soy el rocío que te refresca? ¿Y si nos evaporamos? ¿Y si nos peredemos en una nube? Que nos dore la luz, que nos encontremos, como cuando la Luna y el Sol habitan el mismo cielo.
Comentarios
Brindo por esos momentos en la vida, en que uno descubre el cariño nacer, a veces no pasa a más a veces sí, así que hoy lo hago por ellas que también estuvieron ahí y vieron el cariño de cerca.
Salud!
No los posee a quien se le piden ni necesita pedirlos quien los busca.
Abrazos.
Pero se aprende, el tiempo sirve para eso. Gracias por tu visita. Un abrazo Y felices fiestas