Anoche fui al cine, nada especial, una comedia romàntica: Casanova. Pero me divertí... ¿Con quién? Con Migo Misma, ¿la conocen? Bueno, el caso es que ahora soy de nuevo una niña mimada (¿alguna vez dejè de serlo?), y le pedì a mi papá que me fuera a recoger a la salida del cine. Pero tocaba esperar, ¿qué hacía mientras? Me metí al bar del Mall San Pedro, creo que se llama Fusión. Pedí un margarita, mi coctel favorito. Tocaban trova..., hasta las imágenes de los televisores estaban entretenidas... hasta que ¡zàs!, me sale el primer borracho de la noche: - (Con acento mexicano, y además, ebrio) Fíjate que yo quiero llamar a un mariachi, y dedicarte una canción, porque eres tan linda... ¿te gustan los mariachis o te gusta esta música? - (Ni contarle que adoro las serenatas) Pues, sí, me gusta la trova. Pero no, gracias, así estoy bien. - ¿Te invito? - No, gracias, ya pedí. - Mira, es que fíjate que voy a abrir un bar acá en Costa Rica, y me gustaría invitarte. - No, muchas gracias. Mirá, ...
Comentarios
ademas nunca jugaste de niña juegos de grandes, como jugar al matrimonio, a papa y mama etc.
yo por ejemplo, estaba en el kinder y tenia una amiguitanovia, y jugabamos q nos casabamos y los compañeros nos encerraban solos para la luna de miel, lo q pasa es que al llegar ese punto Sandra, ( asi se llamaba no se me olvida a pesar de los años y que no la volvi a ver nunca) y yo, no sabiamos en que consistia esa parte del juego.
Anyway, creo q cuando somos niños queremos crecer, y con el pasar del tiempo nos va creciendo una ansia de "regresion", con la ventaja de que podemos elegir que jueguito queremos jugar.
depende de la plataforma:
xbox decis??
jajaja
Eso me lleva a pensar... casi siempre nos fijamos en la envoltura del regalo, sin saber que hay adentro ( tema trillado), de todas maneras el ser feito no garantiza que sea una buena persona y viceversa, de todas maneras me parece q saliste de tu capullito de oruga...
Saludos
n.j.